En los últimos años la
Feria del Libro Amazonas se ha vuelto para mi un lugar de paso obligado cada vez que me propongo en solitario, o en compañía de los amigos, realizar mis ya tradicionales peregrinajes por las calles del Centro de Lima. Al principio, como a todos les debe haber ocurrido, me sentí algo intimidado por la sensación de inseguridad y deterioro que caracteriza a sus alrededores. Sin embargo, una vez repuesto del susto inicial y con un poco de presupuesto y bastante curiosidad de por medio, fui descubriendo en las entrañas de este conglomerado comercial todo un mundo paralelo al del circuito formal de venta de libros. Clásico es encontrar apiñados en sus corredores a estudiantes de medicina, escolares y profesionales de distintas índoles buscando aquel libro de texto demasiado caro para el bolsillo, y que sin embargo logra emerger entre rumas kilométricas de papel añejo y cartón parchado, a un precio asequible para el común de los visitantes.
Es la hegemonía del "libro de viejo", reciclaje puro en acción capaz de transformar un panteón de tinta en objetos absolutamente vitales que, en las manos de sus nuevos dueños, vuelven a oler como el primer día en que fueron impresos. Pero que un libro sea viejo no significa que el espacio que lo contenga deba lucir deteriorado, y es que aunque suene contradictorio, es dentro de este mercado informal que se están gestando nuevas ideas que podrían traer consigo un cambio positivo al sector que ocupa, así como a sus inmediaciones. La Alameda de la Cultura es un proyecto urbanístico que plantea la remodelación y adecuación del terreno ocupado actualmente por la Feria Amazonas, mediante la implementación de una serie de equipamientos, espacios públicos y jardines que tendrían como marco general el mejoramiento paisajístico del borde ribereño. Vía
Andina encontré una descripción más amplia de lo que sería este interesante proyecto:
(...) comprende la implementación de un parque sobre un área de siete mil metros cuadrados, donde se levantará una alameda longitudinal, que contará con bancas, faros ornamentales, miradores para contemplar el río Rímac, entre otros detalles paisajísticos.
Así precisó el arquitecto Guillermo Claux, especialista encargado del proyecto, quien destacó que en la zona se construirá, además, un anfiteatro para espectáculos musicales y teatrales, así como una gran biblioteca, donde los lectores podrán apreciar los textos más valiosos.
En diálogo con la agencia Andina, indicó que los libreros estarían distribuidos a lo largo del parque para ofrecer sus libros al público en general que podrá ingresar a esta alameda por diversos puntos de acceso, entre ellos, la esquina del jirón Amazonas con el Puente Balta.
“Esto le dará un mayor valor y realce a esta zona que antes era considerada incluso como insalubre. Esta alameda se verá más como un parque y no tanto como una galería comercial. Los libreros mejoraron la zona cuando fueron reubicados de la avenida Grau”, manifestó.
Para que este proyecto se concrete es necesario culminar los trámites que permitan a los libreros del jirón Amazonas adquirir el referido terreno, pues éste es propiedad del Estado, y por tanto, se espera que la Superintendencia Nacional de Bienes Nacionales lo adjudique. (..)
Puedes visitar la Feria del Libro Amazonas cualquier día de la semana y encontrar todavía la maqueta del proyecto, así que te animo a que te des una vuelta por el Centro, y a que con tu firma apoyes a la construcción de este nuevo espacio que espero pueda beneficiar tanto a los socios de este conglomerado como a nosotros: la ciudadanía.
Hola. Qué pasó con el proyecto?
ResponderBorrar